El perrito estaba tan sucio y su pelo estaba tan enredado, que apenas podía ser reconocido como un animal, muchos pensaron que se trataba de un montón de basura… pero movía la cola!
Su pelo estaba tan enredado y sucio que se veía mucho más grande de lo que realmente era.
Más de la mitad de su tamaño se debía a su pelo enmarañado.
Por esto, sus heroicos rescatistas rapidamente comenzaron a cortar todo ese pelo desagradable.
Se asustó un poco con el ruido de la maquina
Debajo de todo ese pelo, los héroes de la historia, descubrieron a un perrito maravilloso lleno de amor.
El acicalamiento era algo nuevo para él…
Atrás dejaba una vida de miseria con forma de maraña mugrienta.
Así durmió luego de su paso por la peluquería: calentito, limpio y sintiéndose amado.
Cuando despertó, era un animal completamente diferente.
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