Los perros, como los humanos, tenemos personalidades diferentes. Los perros amorosos, juguetones, nerviosos, pasivos, amigables, solitarios, dormilones… ¡De todo!
¿Somos conscientes su personalidad? ¿respetamos su forma de ser? Cuando paseamos por la calle, vamos solos o con nuestros niños, estamos en el parque, etc, con toda nuestra buena fe, solemos ir a acariciar a los perros que nos cruzamos. Pero, ¿sabemos si ellos quieren? ¿nos enfrentaremos a un perro sociable, juguetón, cariñoso? ¿o todo lo contrario?
Para evitar malas ratos, la asociación The Yellow Dog Project ha tenido una gran idea: utilizar un lazo amarillo en la correa de todos los perros que no deseen ser “molestados”. Y no porque tengamos perros peligrosos o gruñones. Puede haber muchas razones por las que un perro lleve un distintivo amarillo: ha sido recientemente operado, sigue algún tratamiento médico, está siendo entrenado, lo acaban de adoptar, el perro se emociona mucho cuando se le acercan, no le gustan los niños…
Con esta idea la asociación de The Yellow Dog Project busca ayudar a la gente a la hora de aproximarse a un perro, y en especial a los niños. Los pequeñines de la casa tienen mucha energía y se aproximan muy pronto a los perros. No a todos los perros les va a gustar y con un lazo amarillo en la correa pondremos en aviso a los demás.
Así que, ¡ya sabes! Si ves a un perro con un lazo amarillo, mantén la distancia, no vayas directamente a acariciarlo y habla con su dueño antes, él te explicará por qué el peludo lleva el lazo.
¿Qué te parece la idea de The Yellow Dog Project? ¡Cuéntanos!
Referencia extraída de: perros.facilisimo.com
Imágenes extraídas de: www.mysocialpet.com y www.superga-spain.com
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